F. Fernández Aeporse "La acumulación de escuelas disminuye la calidad"

Fernando Fernández (1969, Madrid) es el presidente de la Asociación Española de Pilotos y Operadores de RPAS para Seguridad (Aeporse) que agrupa a cerca de 60 miembros de diferentes Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y Emergencias, entre los que destacan la Guardia Civil, la Policía Nacional y Local, los Mossos d'Escuadra, la Ertzaintza, el Cuerpo de Bomberos y el Samur. La asociación nace para dar respuesta a las necesidades particulares de los equipos de primera intervención.

Además, asesoran a la Unión de Jefes y Directivos de la Policía Local (Unijepol). La asociación, nacida en marzo de 2016, también organiza jornadas formativas gratuitas para mostrar a policías cómo intervenir ante sistemas no tripulados e imparte cursos de piloto profesional de RPAS para cuerpos de Policía y cursos de especialización en seguridad y emergencias. En esta primera parte de la entrevista de Infodron.es, Fernández repasa las carencias de la formación para pilotos y las prácticas poco rigurosas de las academias de formación certificadas (ATO, por sus siglas en inglés) en una entrevista que, por su extensión, se publicará en dos partes de la que a continuación puede leerse la primera.

¿Por qué es necesaria una asociación específica para Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y Emergencias?

Estos agentes tienen características especiales. No siempre pueden planificar los vuelos con antelación, hay eventos en los que sí, pero muchas veces tienen que actuar en situaciones de emergencia. Al estrés del momento, se añade la tensión de tener que operar con un RPAS.

¿Qué prioridades se marca la asociación?

Aeporse intenta estar muy presente en foros del sector para colaborar en la regulación y proteger a los pilotos. Queremos ser también un espacio de intercambio de experiencias y prestar servicios de consulta y defensa jurídicas. También buscar seguros específicos para Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y Emergencias. No vale uno de responsabilidad civil, también debe asegurar el aparato a todo riesgo.

¿Cree que la calidad de la formación que se imparte actualmente en las escuelas de formación de pilotos ATO es suficiente?

La calidad depende del centro. Pero diría que es bastante justita. Se ajusta a las condiciones que marca la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA), pero esperamos que este organismo dicte una orden ministerial que fije unos requisitos más estrictos.

¿Por qué dice que la calidad es "justita"?

Las escuelas cumplen con los requisitos mínimos en cuanto a contenidos, pero luego depende mucho de cada centro. Hay algunos que imparten formación a distancia: suben los materiales a una plataforma de internet y fijan autoevaluaciones para que las realice el alumno, que está completamente solo y debe asistir únicamente al examen final. Si suspende, le dejan repetir porque ya ha pagado. Estoy en contra de esa modalidad. Por otra parte, hay escuelas que dan educación de más calidad, presencial o como poco, mediante un sistema de clases por videoconferencia con un registro para controlar la asistencia. Las prácticas se hacen con drones de verdad y no en un simulador. También marca la diferencia que el centro ofrezca hacer prácticas con un dron de mayor tamaño como los que suelen emplear las fuerzas de seguridad en vez de con un dron pequeño. Hay un tipo intermedio de formación en que los contenidos van estando disponibles según se avanza en el temario y hay una cierta interacción con el profesor.

El presidente de Irppa, Ginés Alarcón, criticó en una entrevista con Infodron la baja formación de los pilotos. ¿Cómo lo ve?

Estoy totalmente de acuerdo. A eso hay que añadirle que AESA ha concedido el derecho a impartir la formación a centros de pilotos de aeronaves convencionales. Por muy buena que sea la formación de esas escuelas, con años de experiencia, hay que tener en cuenta que en la mayoría de los casos subcontratan la formación en RPAS a otras empresas. Eso influye en la calidad.

¿Cómo influye?

Todos conocemos alguna situación en que el alumno no ha realizado las horas de vuelo ni superado los contenidos mínimos. O bien hay un control un poco más férreo de AESA con inspectores que comprueben si se lleva a cabo lo exigido por la ley o... El caso es que hay centros en los que se firman registros con actividades que no se han realizado y, el día de clase presencial, los instructores se dedican a dar un repaso general del curso online.

¿Conoce ese tipo de casos?

Sí, pero no me pidas que lo diga.

¿Están muy extendidas esas prácticas?

Es evidente, porque en la asociación conocemos a gente que se forma en distintas escuelas. Suele ocurrir sobre todo cuando hay un cúmulo de escuelas cercanas. Eso lleva a intentar abaratar costes y repercute en el número de instructores y la calidad de la enseñanza.

¿Entonces la competencia entre las escuelas va en detrimento de la calidad?

Totalmente. La acumulación de escuelas disminuye la calidad.

¿De qué manera impulsa Aeporse la formación de pilotos de RPAS?

Los policías tienen el problema de que no pueden asistir a un curso presencial abandonando su puesto, por ello, se hacen cursos por videoconferencia, en diferido, o en fines de semana. Aeporse organiza jornadas informativas gratuitas de cuatro horas sobre la legislación presente y futura. Les enseñamos a discriminar entre vuelos recreativos y profesionales y comprobar documentación como el manual de operaciones y el seguro, el marcado de Conformidad Europea (CE), el cumplimiento del manual de operaciones, la existencia del plan de vuelo, entre otras cuestiones, y a quién comunicar las posibles infracciones.

Continúa en: F. Fernández (Aeporse): “Hasta ahora la introducción de RPAS en la Policía ha sido desordenada“

Imagen: Flavia de Farraces/Infodron.es