Saildrone inicia la campaña de pruebas del USV Surveyor SD-3000 para mapeo oceánico de largo alcance

La compañía estadounidense Saildrone ha comenzado a realizar las pruebas operativas iniciales del vehículo de superficie no tripulado (USV por sus siglas en inglés) Surveyor SD-3000. Esta es la primera embarcación de aluminio diseñada por la firma para llevar a cabo tareas de mapeo oceánico de largo alcance y larga duración, así como estudios de conocimiento del dominio marítimo.

Propulsado por energía eólica, solar y un generador diesel, el Surveyor incorpora lo último en equipos de sonar multihaz para el reconocimiento del fondo marino a profundidades de hasta 11.000 metros. También equipa cargas útiles de defensa y seguridad, especialmente diseñadas para tomar decisiones y respuestas precisas, dinámicas y confiables ante todo el espectro de amenazas y desafíos que existen en alta mar.

Con una eslora de 20 metros y un peso total de 15 toneladas, el Surveyor se clasifica como un USV de tamaño mediano, construido según el código de buques de guerra ligeros de la Oficina Estadounidense de Transporte Marítimo (ABS). Las primeras unidades de este modelo han sido ya contratadas por la Armada de los Estados Unidos (USN) para realizar pruebas y evaluaciones en múltiples entornos. En futuras misiones, esta rama de las Fuerzas Armadas se centrará en la capacidad del USV para ofrecer inteligencia de superficie y submarina en una variedad de aplicaciones de alta prioridad, incluida la guerra antisubmarina (ASW).

Para satisfacer la creciente demanda que tiene la embarcación actualmente, Saildrone se asoció recientemente con el astillero Austal USA para aprovechar sus técnicas avanzadas de producción y fabricación, así como sus capacidades de montaje rápido. Austal es capaz de producir un Surveyor cada seis semanas y cuenta con las capacidades necesarias para aumentar la producción si la demanda lo requiere.

A la botadura del USV asistió la jefa de Operaciones Navales (CNO) y almirante de la Armada, Lisa Franchetti, quien afirmó que “el uso de activos no tripulados ayuda a poner más jugadores en el campo al liberar otros sistemas tripulados para tareas más específicas e importantes”. La almirante también señaló que “es bueno ver que la industria de alta tecnología se asocia con la base industrial de construcción naval para ofrecer rápidamente productos de vanguardia a escala”.