La Agencia de Apoyo y Adquisiciones de la OTAN (NSPA) ha adjudicado a Iveco Defence Vehicles (IDV) un contrato de tres años para el desarrollo conceptual y la experimentación de soluciones robóticas y autónomas (RAS por sus siglas en inglés), en un esfuerzo conjunto por avanzar hacia nuevas capacidades operativas en escenarios de combate reales y complejos.
El programa, liderado por IDV, requiere la integración de sistemas terrestres no tripulados (UGV) y sistemas aéreos no tripulados (UAS), todos coordinados a través de un sistema común de mando y control (C2) avanzado e interoperable, distribuido sobre nodos de red predefinidos. El objetivo es demostrar los beneficios operativos de una solución RAS completamente integrada.
Programa conjunto de desarrollo de capacidades
La iniciativa contará con la participación de usuarios finales, incluyendo el Ejército de Tierra italiano y otras fuerzas armadas de países miembros de la OTAN, que pondrán a prueba estos sistemas en escenarios como reabastecimiento logístico, evacuación médica (Casevac y Medevac), reconocimiento de rutas, misiones Istar (Inteligencia, Vigilancia, Adquisición de Objetivos y Reconocimiento), convoyes con colaboración hombre-máquina (MUM-T) y recuperación de vehículos.
IDV, filial del grupo Iveco, aportará su experiencia en autonomía terrestre con plataformas como el Viking UGV y el LMV OU (Light Multirole Vehicle Optionally Uncrewed), un vehículo versátil capaz de operar en modo manual, por control remoto o de forma autónoma. A estas capacidades se suman las de empresas tecnológicas como LEM, Siralab y Rebel Alliance, que forman parte del consorcio del proyecto.
Soluciones completas para aplicaciones de defensa
Con sede en Bolzano (Italia), IDV diseña y fabrica vehículos logísticos, protegidos y blindados, y adapta la gama comercial de Iveco a los requisitos específicos del ámbito militar, ofreciendo soluciones completas para aplicaciones de defensa a nivel global.
Según ha señalado la compañía, este trabajo conjunto permitirá definir la estrategia RAS de la OTAN y establecer hojas de ruta para la introducción progresiva de esta tecnología en servicio, mejorando la eficacia operativa y reduciendo el riesgo para el personal desplegado.