Munición merodeadora en España: los desarrollos de Arquimea, Instalaza y Swarming

El término munición merodeadora o dron kamikaze era casi desconocido por muchos antes del inicio de la invasión rusa de Ucrania, pero la efectividad de estos sistemas en el conflicto les ha otorgado cierto protagonismo en la guerra. Los más utilizados han sido los Switchblade de Aerovironment, pero ¿con qué sistemas de este tipo cuenta España?

Por el momento, no hay ningún dispositivo operando, pero algunas empresas como Arquimea ya han presentado sus propuestas. Es el caso del dron QLM-40, pensado para unidades que llevan a cabo misiones tácticas. Se trata de un sistema de munición merodeadora (Loetering Munition) único en España, dado a conocer por primera vez al público en la segunda edición de la Feria Internacional de la Defensa y la Seguridad (Feindef), celebrada en Madrid.

El QLM-40 es básicamente un dron equipado con un proyectil. El sistema se pone en el aire con un lanzador automático, justo después despliega las alas y comienza sobrevolar una determinada zona en busca del objetivo. Desde tierra el operador controla cada movimiento desde un punto seguro.

Arquimea explica que este dron kamikaze tiene una autonomía de unos 15 minutos y está pensado para unidades tácticas que se encuentran a una distancia media del objetivo, entre dos y tres kilómetros, por ejemplo, un comando que ha recibido información del lugar en el que está un francotirador enemigo.

Futuros sistemas

Otras empresas como Swarming Technologies and Solutions e Instalaza están trabajando en el diseño de una familia de municiones merodeadoras lanzadas desde tubos desechables.

Instalaza, por su parte, aporta su experiencia en el desarrollo de lanzacohetes (C90 y Alcotán) ya probados en combate, que utilizan un tubo para el lanzamiento de municiones de calibre 90 mm y 100 mm con múltiples propósitos, mientras que Swarming -empresa del grupo Zelenza- contribuye con sus sistemas remotamente tripulados (RPAS) de inteligencia, reconocimiento y vigilancia (ISR) y sistemas de enjambre.

El proyecto apuesta por el diseño de municiones merodeadoras de ala rotatoria (Strix) y ala fija (Milvus) con cabezas de guerra adaptadas a la misión (doble propósito, prefragmentada, contracarro, etc.) y espoleta electromecánica polivalente.

Strix contará con una versión Mini, con un peso máximo al despegue (MTOW) de cinco kilogramos, y otra Micro, de dos kilos. La primera tendrá un diámetro de 700 mm, carga de pago de 0,3 kilos, cabeza de guerra de 0,8 kg, alcance de diez kilómetros, autonomía de 30 minutos y velocidad de 15 m/s. 

Las características de la segunda serán 460 mm de diámetro, carga de pago de 0,2 kg, cabeza de guerra de 0,4 kg, alcance de 4 km y autonomía de 20 minutos. En ambos casos podrá despegar desde tubo, a mano o desde el aire y admitirán distintas cabezas de guerra (lethal, stun, gas o flash).