El precio por unidad ronda los 300.000 euros. Los pliegos del contrato exponen que este tipo de vehículos teleoperados permiten a los agentes del Servicio de Desactivación de Explosivos (Sedex) "desactivar o detonar paquetes sospechosos de contener artefactos o artificios explosivos y realizar la apertura de diferentes tipos de vehículos de forma fiable mientras que el operador de control permanece a una distancia segura".La licitación deja claro que los robots contará con "geometría variables", precisamente una de las principales características del modelo Aunav de Escribano, lo que ofrece, según el fabricante, "una mayor versatilidad y permite aumentar o disminuir su ancho para adaptarse al entorno de la misión en la que opera".El sistema incluye una plataforma UGV (Unmanned Ground Vehicle), un brazo robótico articulado que puede abrir distintos tipos de puertas de edificios o vehículos, módulos de visión y comunicaciones y una unidad de control portátil.
Con esta compra, los Mossos d’Esquadra refuerzan los medios de su Área de Desactivación de Artefactos Explosivos TEDAX-NRBQ. Este robot está especializado en la detección, manipulación y desactivación de artefactos explosivos, así como en la ejecución de misiones en entornos con riesgo nuclear, radiológico, biológico y químico (NRBQ).Según explica el fabricante, entre las principales características del robot destaca el sistema de geometría variable, que ofrece una mayor versatilidad y permite aumentar o disminuir su ancho para adaptarse al entorno de la misión en la que opera.
En el proyecto también participa TRC como subcontratista. Este contrato es el primero en el que Indra y Escribano trabajarán juntas en una UTE conocida como C-UAS, con TRC como socio. Las tres empresas españolas anunciaron en junio de este año la creación de esta alianza industrial para desarrollar sistemas antidrón (C-UAS) adaptados a las necesidades y requisitos de las Fuerzas Armadas en zona de operaciones.Estas compañías ya cuenta con una amplia experiencia en las tecnologías asociadas a estos sistemas para neutralizar drones y disponen de soluciones probadas en operaciones, como el sistema Crow de Indra para dar cobertura a bases militares y eventos singulares, en servicio en el Ejército del Aire y del Espacio o el citado proyecto Cervus del Ejército de Tierra, donde Escribano colabora con TRC. Por su parte, Indra y Escribano también colaboran en la actualidad en soluciones antidrón navales para la Armada.
Por un lado, el antidrón Crow de Indra que combina el uso de radares, cámaras infrarrojas y sensores de radiofrecuencia para detectar, identificar y clasificar amenazas a varios kilómetros y escoger la contramedida más adecuada para bloquear los enlaces de comunicaciones y de geolocalización del dron. Y, por otro, la estación de armas remota Guardian 2.0 de 12,7 mm de Escribano que aporta la capacidad hard kill, si al final es necesario abatir la amenaza. La fragata Canarias, que participó en la operación Atalanta en la primera mitad del año, y la Numancia, desplegada en la actualidad en el Índico, ya tienen instalado este mismo sistema antidrón.Sentinel 30 La Armada ha difundido unas imágenes de las pruebas con este sistema antidrón previas al inicio de la misión.
Para hacer frente a estas amenazas, las empresas Escribano M&E y Thales han cerrado una alianza para el desarrollo Sentinel Rocket, un sistema lanzacohetes conjunto para neutralizar drones tanto en tierra firme como en el mar. Ambas compañías han firmado el acuerdo esta semana en la feria parisina Eurosatory.
Las tres compañías ya cuenta con una amplia experiencia en las tecnologías asociadas a estos sistemas para neutralizar drones y disponen de soluciones probadas en operaciones, como el sistema Crow de Indra para dar cobertura a bases militares y eventos singulares, en servicio en el Ejército del Aire y del Espacio o el proyecto Cervus del Ejército de Tierra, donde Escribano colabora con TRC. Por su parte, Indra y Escribano también colaboran en la actualidad en soluciones antidrón navales. Las empresas destacan que "la unión e integración de sus capacidades aportará una mayor protección y seguridad a las Fuerzas Armadas frente a las nuevas amenazas en el campo de batalla mediante una solución integral C-UAS, que será adaptada para su fácil despliegue e integración en plataformas terrestres, navales, o para la protección de infraestructuras críticas".
La empresa española Escribano Mechanical and Engineering ha participado en el Ejercicio de Interoperabilidad Técnica 2023 (TIE23) sobre sistemas contra aeronaves no tripuladas (C-UAS) de la OTAN (C-UAS), organizado por su Agencia de Información y Comunicaciones (NCIA) y el Ministerio de Defensa de los Países Bajos.Del 12 al 22 de septiembre, más de 100 participantes de 50 empresas y organizaciones se dieron cita en esta nueva edición del evento, celebrado en la localidad neerlandesa de Vredepeel, con el objetivo de abordar la interoperabilidad de los sistemas C-UAS en escenarios relevantes para las operaciones de la OTAN y de mostrar, mediante pruebas en vivo, las capacidades de sus sistemas más novedosos.Además de recalcar la importancia del papel de los drones a nivel geopolítico, esta cita busca asegurar, también, "la operabilidad de los sistemas aéreos no tripulados de la Alianza y su capacidad para defender el espacio aéreo frente a la amenaza de drones enemigos".Tecnología antidrones española de última generaciónEscribano demostró, una vez más, la efectividad de uno de sus sistemas de armamento a control remoto (Remote Weapon system, RWS) más reconocidos en el ámbito terrestre y naval: el Guardian 2.0.
La primera ya ha sido probada en misiones en Mali, la segunda está desplegada en la actualidad en Letonia, y la tercera, la más avanzada.
Cervus fue una de las grandes novedades del stand del Ejército de Tierra en el evento.
El consorcio industrial que integra el proyecto europeo iMUGS sobre vehículos terrrestres no tripulados ha llevado a cabo una demostración con tres UGV Themis en Versalles para poner en valor la importancia del uso de sistemas en Defensa.
El operador establece la misión y el sistema es capaz de llevarla a cabo de forma autónoma.El nuevo UGV incluye la cámara Z:Sparrowhawk de Hensoldt, el radar Squire de Thales, la detección acústica de disparos Metravib Defence Pearl y el sistema Rosy (Rapid Obscuring System) de Rheinmetall.
Esta exhibición es una oportunidad para España, según Defensa, "de dar visibilidad a las empresas nacionales que desarrollan este tipo de sistemas y que cuentan con una tecnología avanzada en la que se valoran aquellos que permitan usos duales (civil-militar)".Durante la cumbre de la OTAN, uno de los medios desplegados por la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado son precisamente los sistemas antidrón para proteger el espacio aéreo de Madrid de posibles ataques de drones.
La empresa española Escribano Mechanical & Engineering está participando en el proyecto Cervus III, un sistema de control de equipos remotos y vehículos no tripulados de vigilancia electrónica que lleva años en marcha pero que se acaba de modernizar con las últimas capacidades entre las que destaca la integración de la estación remota Guardian 2.0.