Galicia utilizará el RPAS de la AESM para la vigilancia de sus costas

En los próximos meses, Sasemar, el organismo de salvamento y seguridad marítima del Ministerio de Transporte, utilizará los servicios de RPAS de la Agencia Europea de Seguridad Marítima (AESM) desde su base MRCC en Finisterre para mejorar la vigilancia marítima general y utilizarlo en una variedad de tareas operativas diferentes, incluido el tráfico marítimo, control y prevención de la contaminación.

Las ventajas de utilizar aeronaves no tripuladas para la vigilancia marítima son reconocidas desde hace varios años por Sasemar, por lo que las operaciones aéreas son una parte fundamental para realizar esta tarea. Si bien los vuelos proporcionarán medios adicionales y complementarios a Sasemar en el desempeño de sus funciones de prevención y control de la contaminación y control del tráfico marítimo, también servirán a las autoridades pesqueras nacionales (Secretaría General de Pesca) que trabajan para proteger los recursos pesqueros y marinos con el fin de asegurar su desarrollo sostenible.

Control de emisiones, protección ambiental, búsqueda y rescate

La directora ejecutiva de la AESM, Maja Markovčić Kostelac, subrayó la importancia de la operación y aseguró que “en mayo de 2017, la AESM comenzó a probar las capacidades de RPAS con Sasemar como uno de nuestros socios pioneros clave”. Markovčić subrayó que “es lógico que Sasemar saque provecho de estos servicios ahora, especialmente por el papel vital que desempeñan los guardacostas. Cuatro años después, nos complace ver que nuestros servicios RPAS se utilizan ampliamente en toda Europa para operaciones de vigilancia marítima en todo, desde el control de emisiones y la protección ambiental hasta el control del tráfico y la búsqueda y rescate ".

El RPAS que se utiliza es un modelo Camcopter S100 de Schiebel y está bajo contrato con la Agencia Europea de Seguridad Marítima de Schiebel Aircraft GmbH. Según informa la AESM, esta aeronave tiene varias características que lo hacen adecuado para este servicio, incluida la capacidad de despegar y aterrizar desde un área menor de 5 mx 5 m, una duración de vuelo de más de seis horas y una autonomía de más de 100 km. La información se recopila a bordo de cámaras ópticas e infrarrojas, así como de un receptor AIS.

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