Dado que la normativa de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) no permite el despliegue de sistemas autónomos para el transporte de pasajeros, por el momento, estos vuelos requerirán la presencia de un piloto certificado, que controle y supervise todas las fases de la operación.No obstante, según Moldes, estos despliegues son complementarios a los que se realizarán en Baleares, con la única diferencia de que “el de Palma será más futurista, porque se integra en el entorno U-Space y contempla vuelos autónomos”.
La compañía está acusada de colaborar con Rusia en el envío de drones iraníes y el traslado de soldados procedentes de Siria.