El alcance máximo del avión no tripulado es de 1.200 kilómetros y, gracias a su capacidad para despegar y aterrizar en pistas cortas, también puede desplegarse en regiones con dificultades en el terreno.
Wengang explicó que “esto plantea un desafío para el sistema convencional de defensa aérea y para responder a este problema se propone por primera vez en este salón aeronáutico este sistema antidrones, para solucionar el desafío de los drones lentos y de baja altitud".